Hermoso film italiano que invita a aceptar la fugacidad de la fama y la persistencia de la memoria como trascendencia vital…

 Por José Blanco Jiménez
(JOBLAR)

Miembro del Círculo de Críticos de Arte de Chile

 

Los “vitelloni” de Fellini se encuentran ahora en el Trastevere romano. Han pasado 63 años, pero están ahí: no hacen nada todo el día, no tienen mayores expectativas y se dedican sólo a pasar los días en las afueras de un bar hablando necedades mientras miran a las mujeres. El mismo protagonista Alessandro tiene un affaire con una adulta joven, madre de uno de sus amigos, que atiende un despacho de juegos de azar. 

La existencia del joven, huérfano de madre desde que tenía dos años, se enturbia por la mala relación con el padre y su nueva pareja, una emigrante eslovaca. No terminó sus estudios y sus perspectivas de trabajo son precarias. Hasta que —en un cierto momento— esa existencia gris se ve remecida por la posibilidad de cuidar a un anciano de 85 años, que interpreta  el gran cineasta Giuliano Montaldo (Sacco y Vanzetti, Giordano Bruno).

Se trata de Giorgio Ghelarducci, un poeta que ya nadie recuerda a pesar de que ganó premios y publicó varios libros. Sufre de Alzheimer y, desde el primer momento, confunde a Alessandro con su difunto hermano Carlo. Además trastoca a las personas que ve con soldados amigos norteamericanos del “passaggio del fronte” durante la Segunda Guerra Mundial.

Él es pisano e —increíblemente— los jóvenes (incluida una muchachita universitaria que trabaja como camarera), Pisa sólo saben que está al norte de Roma.

Estos “centennials” viven en su burbuja interconectados por celulares y por Internet, pero completamente ignaros del mundo que los rodea.

Ghelarducci, en cambio, tiene su propia burbuja de recuerdos, que conforman su universo mental: ha rayado una pared completa con versos y dibujos, que aluden a momentos de su vida.

No se produce un transfert, puesto que es imposible, pero sí un despertar de intereses en Alessandro y —en un primer momento— por un posible tesoro escondido en las montañas de Pistoia.

Y la codicia lo hará estudiar e investigar, o sea, interesarse verdaderamente en algo. Además, tendrá el acicate de sus amigos que son del tipo “scapestrato” (palabra intraducible, que está por uno que se encuentra en el borde de ser un delincuente).

Sin embargo, el verdadero tesoro es la memoria. Sobre todo la de los afectos, que es lo único que trasciende en un mundo cada vez más acelerado y vacío de valores. Por ello, son hermosas reflexiones de Giorgio, que resumen las experiencias vividas: “La poesía es una cosa, la vida es otra. En la poesía puedes amar a quien te parezca; en la vida, sólo amas a la persona que está junto a ti”.

Además, “empiezas a escribir poesía cuando no tienes dónde poner al amor”.

(“Tutto quello che vuoi”. Italia, 2016)

 TRAILER DEL FILM:
“AMIGOS POR LA VIDA” 

PRODUCCIÓN:
FunCinema Tráilers

 

 

 

 

********
JOBLAR EN
“RADIO UNIVERSIDAD DE CHILE”

Escuche los comentarios cinematográficos de JOBLAR en el programa “Escaparate”, que se transmite en “Radio Universidad de Chile” (102.5 FM) los días domingo, a las 21.00 horas; y además online en
www.radiouchile.cl
*********