Película que es un “pastiche” de situaciones, basadas en dos famosos personajes novelescos: Alicia Kingsleigh, de Lewis Carroll, y Peter Pan, de James Matthew Barrie. Lo que podría haber sido un buen resultado se frustra por su falta de magia…
Por: José Blanco Jiménez
(JOBLAR)
Miembro del Círculo de Críticos de Arte de Chile
Los personajes trascienden a sus autores y, sobre todo, cuando caen en manos de productores cinematográficos que sólo quieren sacar provecho financiero de sus historias. Alicia Kingsleigh, de Lewis Carroll, y Peter Pan, de James S. Barrie, son dos excelentes ejemplos de cómo Walt Disney destruyó las intenciones originales de dos escritores del paso entre el siglo XIX y el XX para desarrollar dos exitosos (y notables, lo reconozco) films de animación.
Brenda Chapman, co-realizadora de Valiente (The Brave, 2012), película de animación, se hace cargo de un “pastiche” que mezcla situaciones disímiles, que deberían encontrar su punto de contacto en la necesidad de evasión de dos niños aproblemados.
Todo empieza cuando Alice Darling (Gugu Mbatha-Raw) lee a sus hijos Wendy, John y Michael una historia y empieza a recordar su vida cuando niña (interpretada por la exordiente Keira Chansa), junto a su hermano Peter (Jordan A. Nash), que vieron morir trágicamente a su hermano y enfrentaron la crisis en que cayeron su padre y su madre.
Éstos —según el actual estilo “color conscious casting”, que mezcla personas de distintas razas— están protagonizados por una pareja improbable: Angelina Jolie, que no necesita presentación) y el afro David Oyelowo (actor secundario de más de 70 películas, la más reciente de las cuales es Caos: El inicio – Chaos Walking, de Doug Lyman, 2021). Y no sólo por un problema de piel, sino por una fuerte diferencia social que evidencia en cada visita la hermana de ella (Anna Chancellor).
Él, por su parte, arrastra un drama familiar acentuado por deudas de juego, que no logra subsanar con su trabajo de modelista de barcos famosos.
Hay señales como el internado y los sueños representados por el polvo de hadas, la campanita, los niños perdidos, las peleas con los piratas, el brazo cortado del Capitán Garfio, la reina de corazones y la reina roja del ajedrez, el sombrerero loco, la cueva del conejo blanco y la poción que reduce de tamaño.
Pero no bastan para ambientar una situación, que podría haber sido interesante y que —sin embargo— asemeja más a un “pegoteo” que a un montaje cinematográficamente válido: baste recordar el cameo de Michael Caine, como frecuentador de un garito.
Todo ocurre en una Inglaterra victoriana de utilería y al más puro estilo de Charles Dickens. El espectador puede preocuparse por el destino de dos preadolescentes, pero (yo, por lo menos) no siento en momento alguno la magia de las narraciones de las que quisiera ser la precuela. Y, en efecto, es esa magia la que hizo posible el éxito tanto de las novelas como de las películas del Estudio Disney, del Hook de Steven Spielberg (1991) o de las dos Alicia Kingsleigh de Tim Burton (2010 y 2016).
(“Come Away”. USA, 2020)
TRAILER DEL FILM:
“ÉRASE UNA VEZ”
PRODUCCIÓN:
Trailers TC