Gran cantidad de personajes Marvel en una aventura apasionante con los mejores efectos especiales, que no da tregua y puede generar adicción en aquél que aún conserva la inmunidad…
Por José Blanco Jiménez
(JOBLAR)
Miembro del Círculo de Críticos de Arte de Chile
El cine en pantalla grande no ha perdido su embrujo y la prueba es que vi esta película en IMAX con un público de profesionales de los medios y expertos en cómics, que aplaudía ante la aparición de uno u otro personaje.
Este nuevo episodio del Dr. Strange era esperado por los fans desde hacía mucho tiempo y éstos no van a quedar desilusionados, como tampoco el espectador que quiera ir a verla libre de las ataduras de la adicción a las producciones Marvel.
El nombre de Sam Raimi ya dice mucho (los diferentes Spider Man; Oz, el poderoso / Oz the Great and Powerful, 2013; Arrástrame al infierno / Drag Me to Hell, 2009), y a éste hay que agregar la música de Danny Elfman y los pertinentes efectos especiales.
No se puede ser spoiler con una producción de este tipo y me limito a señalar que tiene como obertura una pesadilla alucinante en la que Strange (Benedict Cumberbatch) aparece junto a una jovencita (América Chávez, interpretada por la latina Xochitl Gómez), que después se sabrá que tiene poderes transdimensionales y que introducirán a la temática del multiverso.
Iniciada la película propiamente tal, Strange asiste al matrimonio de su amada Christine (Rachel McAdams) con otro y debe luchar contra un horrendo cefalópodo ciclópico, que persigue precisamente a América. Es ahí donde interviene Wong (Benedict Wong) y —desde ese momento para adelante—, todo estará supeditado a la acción de Wanda Maximnoff, transformada en la Bruja Escarlata (Elizabeth Olsen).
En realidad, no se trata de la lucha entre el bien y el mal, sino entre la magia y la brujería. Es más: se trata del conflicto entre la necesidad de una vida normal (en el caso de Wanda, el ser madre), y dominar el mundo.
Dos caras de la misma medalla, que destruyen el maniqueísmo y —acatando las tendencias actuales—, la joven América no tiene padre, sino dos madres y una probable tendencia lesbiana.
Ésta es la Fase 4 del Marvel Universe Cinematográfico (MCU) y se presenta más homogénea, incorporando elementos que hasta ahora eran autónomos entre el cine y la televisión.
Es así como, de a poco, personajes de series paralelas empezaron a ser reunidos en crossovers. Y la adquisición de la 20th Century Fox por parte de The Walt Disney Company, ha permitido el ingreso de los X-Men y de los Cuatro Fantásticos.
No puedo callar una secuencia: la batalla musical en que las notas se transforman en armas y una frase para el bronce: “Te amaré en cada universo”. ¡Atención a los bonus track!
(“Doctor Strange in the Multiverse of Madness”. USA, 2022)
TRAILER DEL FILM:
“DOCTOR STRANGE Y EL MULTIVERSO DE LA LOCURA”
PRODUCCIÓN:
Marvel Latinoamérica
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