Un concierto sobre el lecho seco de lo que fue la Laguna de Aculeo se transforma en un manifiesto acerca del abandono y de la precariedad de la cultura en Chile…
Por José Blanco J.
(JOBLAR)
Círculo de Críticos de Arte de Chile
Cuando era niño, encontré en dos libros de lectura una leyenda acerca de la Laguna de Aculeo. Trataba de un carretero que, para escapar de los realistas, se sumergía en sus aguas con una carga de objetos de oro. Después he leído otras versiones, pero todas coinciden en que en ciertas noches (de luna, en Semana Santa, etc.), se oirían los gritos del carretero arreando los bueyes.
Queda en evidencia que, en su situación actual, los restos del carretero y de su carga no han aparecido por ninguna parte. La laguna no existe y sólo queda una cuenca de terrones resecos por el sol. Pero, ¿eso es consecuencia del cambio climático?
En este documental de Atacama Records —dirigido y fotografiado por Cristóbal Garrido, con la codirección de Verónica Barriga—, los que toman la palabra son los músicos.
Efectivamente, son cinco grupos (Mareo!, Yinyer, Ds Mestizo, Armadillo Cactus y el de Camila Vaccaro), los que —a través de sus interpretaciones musicales y sus análisis—, denuncian una realidad de la que el lecho de la Laguna de Aculeo constituye un símbolo.
La verdad es que estamos en la “Era de la ausencia del sentido”. No es el cambio climático, sino la codicia humana la que ha llevado a este desastre. Son las empresas que se han llevado el agua para regar los paltos y los cerezos las que han creado esta crisis medioambiental.
Es así como el concierto se transforma en un manifiesto acerca del abandono y de la precariedad de la cultura en Chile. El agua, al dejar de ser un bien público, resecó la laguna.
Ése es un símbolo, agrego yo, de cómo se reseca el cerebro humano ante la falta de oportunidades de creación y recreación. Y también —insisto una vez más—, lo aceleran declaraciones oficiales del tipo “la educación es un bien de consumo”; o “la educación radica preferentemente en la familia”.
Pero estos músicos no se conforman con denunciar las vanas luchas de los vecinos por el hurto perpetrado a las napas subterráneas o la desaparición de su espejo lacustre. Plantean soluciones, tales cómo generar redes de actividades escénicas y musicales que despierten las inquietudes artísticas y el amor por la tierra y su fertilidad, que vaya más allá del simple beneficio económico.
El agua es un recurso limitado y de ella dependen los ecosistemas, pero para que sea renovable requiere de una buena gestión. Si las actividades productivas son necesarias, mucho más aún lo es que éstas sigan existiendo, que sean sustentables a futuro. Lo mismo ocurre con una buena gestión cultural, que permita mejorar el desarrollo social y ambiental del país. Si no, es como el espacio estéril de la laguna que agonizó ante la indiferencia gubernativa y ya no existe.
(“Ausencia del agua”. Chile, 2022)
PROTAGONISTAS
LINK DOCUMENTAL
“AUSENCIA DEL AGUA”
tps://atacamarecords.cl/index/ausencia-del-agua-documental/
PRODUCCIÓN:
Atacama Records