Nuevos personajes y nuevas aventuras. Una exploración en un mundo psicodélico, que tiene una clara lectura ecológica y enfatiza la necesidad de la solidaridad para enfrentar los problemas comunitarios…
Por José Blanco Jiménez
(JOBLAR)
Círculo de Críticos de Arte de Chile
Se trata de la sexagésima primera película animada, producida por los Walt Disney Animation Studios y ejecutada por computador, apoyándose en voces de actores conocidos en la versión original.
Los protagonistas son la familia Clade: el patriarca Jaeger, su hijo Searcher (que quiere ser granjero y no explorador), su nieto Ethan (que aparece 16 años más tarde), y Meridian (esposa de Searcher y madre de Ethan).
A ellos hay que agregar Callisto Mal, que llega a ser presidenta del pueblo donde se encuentran. Todo, respetando la diversidad racial y sexual.
Viven en un lugar llamado Avalonia, del que —al igual que Truman Burbank (The Truman Show, de Peter Weir, 1998), no pueden salir yendo más allá de las montañas. Fuera de ser la temática de varias distopías, como Divergente (2011-2013), o Maze Runner (2014-2018), tiene diversos antecedentes literarios, que van desde George Orwell a Aldous Huxley.
En un prólogo se muestra cómo la familia se divide por la obcecada determinación de Jaeger y años más tarde volverá a reunirse (ya aumentada), ante la necesidad de intervenir, porque la placentera existencia del pueblo se ve entorpecida por extrañas interferencias que provienen del subsuelo.
Esta vez, la exploración no será a pie, sino en una nave ultramoderna y de excelente rendimiento. Y es así como entran en un mundo lleno de colores y de seres extraños en el que encontrarán al mismísimo Jaeger, que todos creían muerto.
La puesta en escena es extraordinaria y de gusto marcadamente psicodélico. A pesar de que dura 102 minutos, creo que entretendrá también al público pequeño. Es ágil y, personajes como Splat, una simpática y flexible criatura de color azul, le dan un tono divertido y humorístico.
A pesar de que el relato lleva a pensar en otras películas, creo que hay una que es necesario señalar: Viaje fantástico (Fantastic Voyage, de Richard Fleischer, 1966), que es una de las más entretenidas que he visto en mi vida.
Les recuerdo que trata de un grupo de especialistas que es inyectado en un cuerpo para efectuar una intervención dentro del cerebro de un científico.
Sin ser spoiler, puedo sólo decir que —según la hipótesis Gaia—, el planeta Tierra se autorregula en la biósfera y funciona como si fuera un sistema vivo. ¡Y no digo más!
(“Strange World”. USA, 2022)
TRAILER DEL FILM:
“UN MUNDO EXTRAÑO”
PRODUCCIÓN:
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